Más que un Blog: un altavoz para nosotras

La importancia de sostener el micrófono para que otras puedan ser escuchadas; lo trascendente de encontrar un espacio compartido que sea reflejo y refugio.

Creo que siempre me gustó escribir. Pensándolo mejor, puede que “gustar” no sea la palabra indicada; decir que siempre me sirvió escribir es más realista.

Mientras escribo esto, lloro. Acabo de leer una nota que escribí hace dos años, sobre una pérdida importante en mi vida y el proceso de duelo. Mis palabras me llevaron de nuevo a esos recuerdos, a esos sentimientos. El nudo en la garganta se hizo sentir a partir del segundo párrafo, seguido de este puñado de lágrimas liberadoras. Mi propia escritura funcionando como una llave de acceso infalible a mis emociones y recuerdos.

Pensaba que escribir me ayudaba a liberarme, pero ahora me corrijo: escribir también me sirve para leerme, para re-conectarme, para no olvidarme de mí, para sanarme. Pero esto no va de hacerle fomo al journaling, que es un tema al que volveremos en otra oportunidad.

Ahora, ¿cómo llegué a las lineas que me hicieron llorar? Estaba organizando la app Notas, clasificando escritos en carpetas temáticas, con el fin último de armar un folder exclusivo para los borradores de este blog, que hoy estás leyendo. Después de enviar las primeras tres invitaciones a quienes deseo se conviertan en las primeras colaboradoras de esta sección de la web, pensé que lo más coherente —si planeo tener un blog— es crearme el hábito de escribir.

Una de mis metas más importantes, al hacer acompañamiento en consulta, es la de guiarlas en la creación de hábitos que cambien su vida, un día a la vez. Después de explorar numerosas teorías sobre este tema, de tratar de discernir si se necesitan 28 o 31 días para formar un hábito, de convertirme en una fiel creyente de James Clear gracias a Atomic Habits y de mucha prueba y error, puedo decir que no hay camino corto hacia la creación de un hábito. Pero créanme, chicas, la recompensa es más que gratificante: es transformadora y poderosa.

Porque conozco ese dulce sabor de la victoria de haber creado un hábito saludable para una misma, me prometo en este primer artículo, como una declaración de intenciones, mantenerme en el ejercicio de esta escritura. No solo eso; te invito, querida amiga, a hacer lo mismo. Este espacio, este rinconcito en el vasto universo del internet, pretende ser de todas nosotras; por eso, si tenes algo que decir y deseas compartirlo, este es tu altavoz.

La magia en la diversidad de maneras que tenemos las mujeres de ver el mundo es algo que merece ser compartido. Tus experiencias, tus ideas, tus miedos, tus logros, tu historia, pueden ser de gran inspiración para otras. Sos bienvenida a compartirlas acá y podes escribirme a info@bravawllnss.com.

Para terminar, no les voy a prometer mucho sobre este blog porque, primero, es algo que hago por puro placer, algo que tuve ganas de hacer por mucho tiempo y, ahora, me lo estoy regalando; por lo tanto, no me voy a presionar para que sea perfecto o para que cumpla con ningún tipo de expectativas (ni mías ni ajenas). Pero miento si les digo que no tengo expectativa alguna sobre este espacio. Más allá de cómo se vaya dando, espero que esto sea de alguna utilidad para ustedes alguna vez; espero que se convierta en un espacio colectivo de nutrición para la vida y de apoyo para nosotras.

Bienvenidas al Blog amigas, espero leernos pronto.

Con amor,

Ili